BIC

Cultura inicia la modificación del BIC de la Catedral de Murcia y la Capilla de los Vélez

Esta iniciativa ha sido impulsada por la Asociación para la Conservación del Patrimonio de la Huerta de Murcia (Huermur)
Catedral de Murcia (foto: Turismo de Murcia)
Catedral de Murcia (foto: Turismo de Murcia)

La Asociación para la Conservación del Patrimonio de la Huerta de Murcia (Huermur) ha conseguido que la Consejería de Turismo, Cultura, Juventud y Deportes inicie el proceso administrativo para actualizar las declaraciones de Bien de Interés Cultural (BIC) de la Catedral de Murcia y la Capilla de los Vélez. Ambas fueron declaradas monumentos Históricos-Artísticos en 1928 y 1931, pero aún no se han adaptado a las leyes de patrimonio actuales.

Necesidad de actualización

Huermur ha señalado que la falta de adaptación a la Ley de Patrimonio Histórico Español de 1985 y la Ley de Patrimonio Cultural de la Región de Murcia de 2007 implica que estos monumentos carecen de un entorno de protección BIC adecuado. Esto afecta la salvaguarda de sus zonas próximas y el paisaje, así como la protección oficial de los bienes muebles y el patrimonio inmaterial asociados.

Objetivos de la iniciativa

El principal objetivo de Huermur es que la Consejería adapte y actualice en una sola declaración BIC todos los elementos de la Catedral de Murcia. Esto incluye el entorno de protección, el listado de bienes muebles y el patrimonio inmaterial, garantizando una protección clara y acorde a la ley.

Historia y patrimonio de la Catedral de Murcia

La Catedral de Murcia, cuya primera piedra se colocó en 1394 y se consagró en 1467, contiene elementos arquitectónicos como el claustro gótico del obispo Pedro de Peñaranda y la Capilla de los Vélez, construida en estilo gótico flamígero entre 1490 y 1507.

Patrimonio inmaterial

Huermur destaca la importancia de reconocer y proteger el patrimonio inmaterial asociado a la Catedral. Esto incluye tradiciones como la procesión del Corpus Christi, la Misa Mozárabe de San Fulgencio, y ceremonias ligadas a epidemias y sequías. También menciona la importancia de preservar el Toque Manual de Campana y otras manifestaciones culturales.

Bienes muebles a proteger

Entre los bienes muebles, se destacan las rejerías, retablos, la custodia procesional del Corpus Christi, el órgano de la Catedral de 1854, y el coro del siglo XVI. Además, la declaración debe incluir la protección de los fondos del Museo Catedralicio y el Archivo Catedralicio, que conservan gran parte de la historia documental de la Región.